martes, 10 de junio de 2014

Imagenes: Para los casados


Si eres soltero(a) ……….. DE LA QUE TE SALVASTE

Si eres casado(a) ……… VERTE EN ESE ESPEJO



 









 

Chiste: Seminario de mujeres

9 mujeres fueron a un seminario para mejorar su relación amorosa con su
marido. El parroco les preguntó:

-Cuántas de ustedes aman a sus maridos?

Todas las mujeres levantaron la mano. Luego se les preguntó:

-Cuándo fue la última vez q le dijeron a sus marido q lo amaban?

Unas respondieron hoy, otras ayer, otras no recuerdan... Entonces se les
pidió q cogieran sus teléfonos y enviaran el siguiente mensaje a sus
maridos:

-Te quiero y te amo mucho, mi vida!!!??

Luego se les pidió q leyeran las respuestas d sus maridos... Estas fueron
las respuestas:

1. Que fue mija,, que teneis ? ??

2. Ver.. ? Chocaste el carro otra vez? ??

3. No entiendo q me quieres decir!!! ??

4. Q has hecho ahora? No te voy a perdonar esta vez!!! ??

5. Que fue te drogaste ???

6. Deja el rodeo, dime cuánto necesitas y ya!!!??

7. Estoy soñando??? o este mensaje es para el vecino.

8. Si no me dices para quien coño d la madre es este mensaje, te mato
marditaaa

Y la mejor de todas:

9. Quién eres? Quiero conocerte, envíame una foto!!!

lunes, 9 de junio de 2014

Chiste: Esto es un vendedor

Juan no tenía problemas y era feliz. Un día empezó a sufrir dolores de cabeza,
ligeros al principio, pero que fueron aumentando hasta llegar a ser insoportables.

Cuando su trabajo y su vida empezaron a ser afectados por
este problema, Juan se decidió a ir al médico.

El especialista lo examinó, realizó radiografías,
muestras de sangre, de heces, de orina, y por fin le dijo:

-Le tengo una noticia buena y una mala.
-La buena es que puedo curarle sus dolores de cabeza.
-La mala es que para hacerlo tendré que castrarlo.
Usted sufre una rara situación en la que sus testículos oprimen la base de su columna vertebral,
y eso le causa dolores de cabeza.
La única manera de remediarlo es extirpar sus testículos.

Juan quedó deprimido, pero sus jaquecas empeoraban
y desesperado decidió someterse a la operación.

Al salir del hospital, el dolor de cabeza había desaparecido por completo,
pero se sentía abatido y desanimado, como si le faltara una parte de sí mismo (obviamente).

-Lo que necesito es un traje nuevo- se dijo
Así que entró en la tienda y pidió un traje.

El vendedor lo observó por un momento y dijo:
-Muy bien, talla 44.
-¡Exacto! ¿Cómo lo supo?.
-Es mi trabajo -repuso el vendedor-.
Juan se probó el traje, que le quedó perfectamente.
Mientras se observaba en el espejo, el vendedor le dijo:
-¿Qué le parece una camisa nueva?
Juan respondió:
-Pues, ¿por qué no?
-Veamos, ha de ser un 34 de mangas y dieciséis de cuello.

- ¿Cómo lo supo?
-
Es mi trabajo -repitió el vendedor-.
Juan se puso la camisa y mientras se veía en el espejo, el vendedor le dijo:
-¿Unos zapatos nuevos?
-Por supuesto -dijo-.
El vendedor echó un vistazo a los pies de Juan.
-Un 42

-¡Exacto! ¿Cómo lo supo?
-
Es mi trabajo -respondió el vendedor-
Mientras Juan admiraba sus zapatos nuevos, el vendedor le preguntó:
-¿Qué le parece si se lleva también unos calzoncillos nuevos?
Juan por un segundo pensó en la operación que acababa de sufrir, y dijo:
-¡Buena idea!

-Debe ser calzoncillo de talla 36 -dijo el vendedor
Juan se rió:
-No, se equivoca. He usado talla 34 desde los dieciocho años.

El vendedor negó con la cabeza: 
-No es posible que use la 34; 
-el calzoncillo estaría demasiado apretado, le presionaría los huevos
contra la base de la columna y tendría todo el día un tremendo dolor de cabeza......!!!!!!!!!!!!