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miércoles, 8 de septiembre de 2010

OFREZCO MIS SERVICIOS COMO PROFESIONAL

Un profesional desempleado despertó una mañana y revisó su bolsillo. Todo
lo que le quedaba eran $10. Decidió utilizarlos para comprar comida y
esperar así la hora de morir, ya que era demasiado orgulloso como para pedir
limosna.

Estaba tan frustrado por no encontrar empleo y no tenía a nadie disponible
para ayudarle..

Compró su comida y en cuanto se sentó a comer, un anciano y dos pequeños
niños se le acercaron y le pidieron que les diera comida, ya que no habían
comido en casi una semana.

El profesional los miró. Estaban tan flacos que se les notaban los huesos.
Sus ojos se les habían hundido. Con el último pedazo de compasión que le
quedaba, les dio su comida.

El anciano y los niños oraron para que Dios le diera bendiciones y
prosperidad, y le dieron una moneda muy antigua. El joven profesionista les
dijo "ustedes necesitan esa oración más que yo".

Sin dinero, sin empleo y sin comida, el joven fue debajo de un puente a
descansar y esperar la hora de su muerte.

Estaba a punto de quedarse dormido, cuando vio un Viejo periódico en el
suelo. Lo levantó, y de repente leyó un anuncio para los que tuvieran
monedas antiguas, las llevaran a cierta dirección.

Decidió ir a ese lugar con la moneda Antigua que el anciano le dio. Al
llegar al lugar, le dio la moneda al propietario del lugar. El propietario
gritó, sacó un gran libro y le mostró al joven graduado una foto.



Era la misma moneda, cuyo valor era de 3 millones de dólares. El joven
graduado estaba muy emocionado mientras el propietario le dio una ficha
bancaria por los 3 millones. El joven cobró el dinero y se fue en búsqueda
del anciano y los niños.

Para cuando llegó a donde los dejó comiendo, ya no estaban. Le preguntó al
dueño de una cantina cercana si los conocía. El dueño le dijo que no los
conocía, pero que le habían dejado una nota. Rápidamente abrió la nota
pensando que averiguaría donde encontrarlos.

Esto era lo que la nota decía: "Nos diste todo lo que tenías, y te hemos
recompensado con la moneda, firma: Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo. 1
Reyes 17:10-16; Mateo 11:28-30.

Oración:
Esta es tu bendición financiera! Es una simple oración, tienes 30 segundos.
Si necesitas una bendición financiera, continúa leyendo este e-mail.

Glorioso Padre, generoso y amoroso Dios, te oro para que nos bendigas
abundantemente a mi familia y a mi. Sé que sabes que una familia es más que
un padre, madre, hermana, hermano, esposo y esposa, sino que familia somos
todos los que creemos y confiamos en ti. Padre, elevo esta plegaria rogando
bendición financiera no solo para la persona que me envió este correo, sino
para mí y para todos a los que reenvíe este mensaje. Y que el poder de
nuestras oraciones unidas para aquellos que creen y confían en ti , sea
poderosa.

Te agradezco de antemano por tus bendiciones. Dios padre, libera a la
persona que está leyendo , en este momento y a aquellos que lo harán en el
futuro próximo, de sus deudas y sus lastres. Dame tu grandiosa sabiduría
para ser un buen administrador (a) por sobre todo lo que me has dado Padre,
porque sé cuán maravilloso y poderoso eres y como, si solo obedecemos y
caminemos dentro de tu palabra y tenemos la fe de una semilla de mostaza,
derramarás de tus bendiciones. Te doy gracias Señor por las recientes
bendiciones que he recibido y por aquellas que han de venir porque sé que no
has terminado conmigo todavía. Oro en tu nombre, Amén.

sábado, 9 de enero de 2010

Cuento de Charles Plumb. Paracaidas

Charles Plumb, era piloto de un bombardero en la guerra de Vietnam.
Después de muchas misiones de combate, su avión fue derribado por un misil.
Plumb se lanzó en paracaídas, fue capturado y pasó seis años en una prisión norvietnamita. A su regreso a Estados Unidos, daba conferencias relatando su odisea, y lo que aprendió en la prisión.
Un día estaba en un restaurante y un hombre lo saludó:

Le dijo "Hola, usted es Charles Plumb, era piloto en Vietnam y lo derribaron verdad?" "Y usted, ¿cómo sabe eso?", le preguntó Plumb.
"Porque yo empacaba su paracaídas. Parece que le funcionó bien, ¿verdad?"
Plumb casi se ahogó de sorpresa y con mucha gratitud le respondio.
"Claro que funcionó, si no hubiera funcionado, hoy yo no estaría aquí."

Estando solo Plumb no pudo dormir esa noche, meditando:
¿“Se preguntaba Cuántas veces vi en el portaviones a ese hombre y nunca le dije buenos días, yo era un arrogante piloto y él era un humilde marinero?"
Pensó también en las horas que ese marinero paso en las entrañas del barco enrollando los hilos de seda de cada paracaídas, teniendo en sus manos la vida de alguien que no conocía.

Ahora, Plumb comienza sus conferencias preguntándole a su audiencia:
¿"Quién empacó hoy tu paracaídas?".
Todos tenemos a alguien cuyo trabajo es importante para que nosotros podamos salir adelante. Uno necesita muchos paracaídas en el día: uno físico, uno emocional, uno mental y hasta uno espiritual.

A veces, en los desafíos que la vida nos lanza a diario, perdemos de vista lo que es verdaderamente importante y las personas que nos salvan en el momento oportuno sin que se los pidamos.
Dejamos de saludar, de dar las gracias, de felicitar a alguien , o aunque sea, decir algo amable sólo porque sí.

Hoy, esta semana, este año, cada día, trata de darte cuenta quién empaca tu paracaídas, y agradécelo.
Aunque no tengas nada importante que decir, envíale este mensaje a quien o a quienes alguna vez lo hicieron.
Y también mándaselo a quienes todavía no lo han hecho.

Las personas a tu alrededor notarán ese gesto, y te lo devolverán empacando tu paracaídas con ese mismo afecto
Todos necesitamos de todos, por eso demuéstrales tu agradecimiento

A veces las cosas mas importantes de la vida solo requieren de acciones sencillas
Solo una llamada, una sonrisa, un gracias, un Te Quiero, un Te Amo.
Gracias por todos los favores que sin merecerlos recibi de ti y nunca te agradeci.
Que tengas un feliz dia.