Cualquier cosa que le des a una mujer, ella hará algo fabuloso:
Dale un espermatozoide y ella te dará un bebé.
Dale una casa y ella te dará un hogar.
Dale alimentos y ella te dará una exquisita comida.
Dale una sonrisa y ella te dará su corazón.
Ella multiplica y engrandece todo lo que le des.
Así que si le das problemas... ¡¡¡prepárate cabrón!!!
Un blog destinado a la coleccion de los mejores chistes y curiosidades que llegan por email. Videos, fotos, imagenes y mucho más
miércoles, 27 de abril de 2011
Chiste: Asi rezan las mujeres
Señor te pido:
* SABIDURÍA para entender a este hombre,
* PACIENCIA para soportarlo,
* BONDAD para tratarlo,
* AMOR para perdonarlo; y no te pido
* FUERZAS Señor, porque si me las dasss..........
* SABIDURÍA para entender a este hombre,
* PACIENCIA para soportarlo,
* BONDAD para tratarlo,
* AMOR para perdonarlo; y no te pido
* FUERZAS Señor, porque si me las dasss..........
¡¡¡LO MATO!!!....
Amén.
Chiste: Pension por vejez
Al cumplir la edad reglamentaria me presenté al Seguro Social a tramitar la pensión por vejez.
La funcionaria detrás de la ventanilla me pidió la cédula de identidad para verificar mi edad.
Busqué en todos los bolsillos, pero finalmente caí en cuenta que había dejado la cédula en la casa.
Le dije a la oficinista que lo sentía mucho, que iría a la casa y volvería más tarde.
En eso, la oficinista me dijo:
- 'Desabotónese la camisa'.
lo hice y le mostré los abundantes, pero canosos VELLOS del pecho.
'Esos vellos canosos son prueba suficiente para mí', dijo la mujer y me procesó la solicitud.
Cuando regresé a casa, emocionado le conté a mi esposa lo que me había sucedido en el Seguro Social.
Comentó entonces ella:
- '¡Debiste bajarte los pantalones. A lo mejor también te DABAN UNA PENSIÓN POR INVALIDEZ!'...
La funcionaria detrás de la ventanilla me pidió la cédula de identidad para verificar mi edad.
Busqué en todos los bolsillos, pero finalmente caí en cuenta que había dejado la cédula en la casa.
Le dije a la oficinista que lo sentía mucho, que iría a la casa y volvería más tarde.
En eso, la oficinista me dijo:
- 'Desabotónese la camisa'.
lo hice y le mostré los abundantes, pero canosos VELLOS del pecho.
'Esos vellos canosos son prueba suficiente para mí', dijo la mujer y me procesó la solicitud.
Cuando regresé a casa, emocionado le conté a mi esposa lo que me había sucedido en el Seguro Social.
Comentó entonces ella:
- '¡Debiste bajarte los pantalones. A lo mejor también te DABAN UNA PENSIÓN POR INVALIDEZ!'...
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)