martes, 20 de septiembre de 2011

Chiste: Colchon ortopedico para hombres



No quiero imaginar como será el de las mujeres!!

Chiste: El reloj cu-cu

Anoche salí con mis amigas a una  'reunión'. Yo le dije a mi marido que regresaría a casa a las 12 en punto. 'Te lo prometo', le dije; pero la 'reunión' estuvo muy buena!!
....copitas, bailecito, más copitas..., y se me fue la hora!!!

Resulta que llegué a casa a las 3 de la madrugada completamente borracha.... Acababa de entrar y el mugre reloj cucú hizo 'cu-cu' tres veces. Al darme cuenta que mi marido se iba a despertar por ese  sonido, grité 'cu-cu' otras 9 veces más... Me quedé tan orgullosa  y satisfecha por haber tenido de pronto, aunque borracha, una idea tan  buena para evitar pelear con mi marido...!!!

Me acosté de lo más  tranquila pensando en lo inteligente que soy!!!Por la mañana,  durante el desayuno, mi marido me preguntó a qué hora había llegado y le  contesté que había llegado a las 12 en punto, tal y como le había prometido. El, de momento, no dijo nada, ni me pareció desconfiado, 'qué bieeeeen! ...salvaaaada!' -...pensé yo.
 
Entonces él me  dijo: 'por cierto...debemos cambiar nuestro reloj cucú.' Le pregunté temblorosa, 'sííííí? ...y por qué mi amor Y me dijo: 'bueno,  anoche el reloj hizo 'cu-cu' tres veces, .....luego, no sé cómo, gritó '¡¡mierda!!', .....después hizo 'cu-cu' cuatro veces  más, ...... vomitó  en el pasillo, .....hizo 'cu-cu' otras tres veces, ..... se cagó de la  risa y otra vez hizo 'cu-cu', .....salió corriendo, pisó al gato, rompió la mesita de la esquina de la sala, se acostó a mi lado dando el  último 'cu-cu', se tiró un peo y se durmió.

Historia: El tren de la vida


La vida se asemeja a un viaje en tren. Con sus estaciones y cambios de vía, algunos accidentes, sorpresas agradables en algunos casos, y profundas tristezas en otros…

Al nacer, nos subimos al tren y nos encontramos con nuestros padres, creemos que siempre viajarán a nuestro lado…  Pero en alguna estación ellos se bajarán dejándonos seguir el viaje, de pronto nos encontraremos sin su compañía y su amor irreemplazable...

No obstante, muchas otras personas que nos serán muy especiales y significativas, se irán subiendo al tren de nuestra vida...  Nuestros hermanos, amigos y en algún momento, el amor de nuestra vida...

Algunos tomarán el tren, para realizar un simple paseo… Otros durante su viaje pasarán por momentos de oscuridad y tristeza… Y siempre encontraremos quienes estén dispuestos ayudar a los más necesitados…

Muchos al bajar, dejan un vacío permanente… otros pasan tan desapercibidos que ni siquiera nos damos cuenta que desocuparon sus asientos...

Es curioso ver como algunos pasajeros, aún los seres queridos, se acomodan en coches distintos al nuestro… Durante todo el trayecto están separados, sin que exista ninguna comunicación… 

Pero en realidad, nada nos impide que nos acerquemos a ellos si existe buena voluntad de nuestra parte…  De lo contrario, puede ser tarde y encontraremos a otra persona en su lugar…

El viaje continúa, lleno de desafíos, sueños, fantasías, alegrías, tristezas, esperas y despedidas...  

Tratemos de tener una buena relación con todos los pasajeros, buscando en cada uno, lo mejor que tengan para ofrecer. En algún momento del trayecto, ellos podrán titubear y probablemente precisaremos entenderlos… pero recordemos que nosotros también, muchas veces, titubeamos y necesitamos a alguien que nos comprenda.
El gran misterio para todos, es que no sabremos jamás en qué estación nos toca bajar. Como tampoco dónde bajarán nuestros compañeros de viaje, ni siquiera el que está sentado a nuestro lado.

A veces pienso en el momento en el que me toque bajar del tren. ¿Sentiré nostalgia, temor, alegría, angustia...?  Separarme de los amigos que hice en el viaje, será doloroso y dejar que mis hijos sigan solos, será muy triste. Pero me aferro a la esperanza de que en algún momento, tendré la gran emoción de verlos llegar a la estación principal con un equipaje que no tenían cuando iniciaron su viaje.

Lo que me hará feliz, será pensar que colaboré para que ellos crecieran y permanecieran en este tren hasta la estación final.

Amigos…hagamos que nuestro viaje en este tren tenga significado, que haya valido la pena.

“Vivamos de manera que cuando llegue el momento de desembarcar, nuestro asiento vacío, deje lindos recuerdos a los que continúan viajando en el Tren de la Vida”

FELIZ VIAJE A MI QUERIDA FAMILIA !!!